El Gobierno de Ecuador declaró este sábado el estado de "alerta máxima" tras la divulgación de un informe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas que advierte sobre un supuesto plan para asesinar al presidente reelecto, Daniel Noboa.
El documento, fechado el jueves 17 de abril, sostiene que tras la victoria de Noboa en el balotaje frente a la candidata correísta Luisa González, "se ha iniciado el traslado de sicarios desde México y otros países hacia el Ecuador, con la finalidad de realizar atentados terroristas contra el Presidente de la República y sus funcionarios más cercanos".
La filtración del informe a través de redes sociales generó una rápida reacción oficial. En un comunicado difundido durante la madrugada del sábado, el Ministerio de Gobierno afirmó: "Condenamos y repudiamos enérgicamente cualquier intento de atentar contra la vida del señor Presidente de la República, autoridades del Estado y funcionarios públicos".
"El Estado está en alerta máxima. Las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y los organismos de inteligencia están trabajando de forma articulada para neutralizar cualquier amenaza", agregó el mismo comunicado.
El gobierno responsabilizó del supuesto plan de magnicidio a "estructuras criminales, en complicidad con sectores políticos derrotados en las urnas", aunque no brindó detalles sobre los presuntos responsables ni sobre las medidas específicas que se están tomando en materia de seguridad.
Daniel Noboa, de 36 años, obtuvo su reelección en los comicios del pasado fin de semana y extenderá su mandato hasta 2029. Durante su primer período, que comenzó en noviembre de 2023, se enfrentó a una profunda crisis de seguridad y declaró el "conflicto armado interno" contra grupos criminales que operan en el país, muchos de ellos con vínculos con carteles internacionales.
En enero de este año, el país fue escenario de una ola de violencia que incluyó motines carcelarios, atentados con explosivos y secuestros temporales de periodistas, lo que derivó en la declaración del estado de excepción. En ese contexto, el gobierno atribuyó gran parte de la violencia a bandas vinculadas al narcotráfico y al crimen organizado transnacional.
Hasta el momento, el presidente Noboa no ha realizado declaraciones públicas sobre la denuncia del presunto plan para asesinarlo. Su equipo de seguridad fue reforzado y se esperan nuevos anuncios oficiales en las próximas horas.




