La Justicia mendocina condenó a 10 años y 6 meses de prisión a Laura Micaela Pérez, la joven de 22 años que admitió haber asesinado de un disparo a su hermano, Raúl Ezequiel "Padi" Pérez, durante un violento episodio ocurrido en La Favorita a mediados de 2025.
El caso se resolvió en menos de seis meses mediante un juicio abreviado, instancia en la que la acusada reconoció su responsabilidad en el hecho. La fiscal Florencia Díaz Peralta y la defensora oficial Laura García acordaron imponer la pena mínima prevista para el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego. El agravante del vínculo no se aplica entre hermanos, según establece la normativa vigente.
Un conflicto familiar marcado por violencia y robos
El crimen ocurrió el 23 de junio de 2025, cuando Raúl Pérez, de 29 años, estaba en una parada de colectivos en la esquina de Pablo Neruda y avenida Libertadora, en el barrio La Favorita. Según la investigación, una motocicleta con dos mujeres se detuvo en el lugar y la conductora -luego identificada como su hermana menor- le disparó, causándole la muerte en el acto.
De acuerdo con testimonios recopilados en la causa, "Padi" era conocido en la zona por cometer robos y atravesar problemas severos de consumo. Vivía prácticamente en situación de calle y mantenía una relación conflictiva con su familia, especialmente con su hermana.
Los investigadores determinaron que el ataque fue el desenlace de una serie de episodios previos de malos tratos y sustracción de pertenencias, que habrían generado un extremo nivel de hartazgo en la acusada. Horas antes del homicidio, la víctima le habría robado un par de zapatillas, hecho que habría detonado la reacción violenta.




