La dirigente opositora venezolana María Corina Machado reapareció este jueves en Oslo, donde fue recibida por un centenar de seguidores tras permanecer once meses en la clandestinidad. Su llegada a la capital noruega se produjo de manera reservada para asistir a la ceremonia del Premio Nobel de la Paz, reconocimiento que fue recibido por su hija, Ana Corina Sosa.
En un primer contacto con el público, Machado saludó desde el balcón del hotel donde se aloja, gesto que generó ovaciones y el canto del himno nacional venezolano. Más tarde bajó a la calle para saludar a los simpatizantes que la recibieron entre gritos de libertad y pedidos de ayuda para regresar a su país, en una escena que alteró la tranquilidad habitual del centro de Oslo.
Su aparición ocurre en medio de la fuerte tensión diplomática entre Venezuela y Estados Unidos, que desde agosto mantiene un despliegue naval en el Caribe y el Pacífico para combatir el narcotráfico, operativo que ha dejado decenas de muertos. La situación escaló en los últimos días tras la incautación de un petrolero estadounidense frente a las costas venezolanas.
Machado evitó responder preguntas de la prensa mientras saludaba a la gente. Entre quienes se acercaron se encontraban también figuras políticas venezolanas en el exilio, como Leopoldo López, Lilian Tintori y Antonio Ledezma, radicados actualmente en España.
Durante la madrugada regresó a su hotel acompañada por su madre, Corina Parisca, llevando banderas, rosarios y estampas entregadas por sus seguidores. Un grupo de simpatizantes permaneció en el lugar hasta verla nuevamente asomarse al balcón del Grand Hotel.
Se trata de su primera aparición pública desde enero, cuando participó en una marcha en rechazo a la juramentación de Nicolás Maduro para un nuevo período presidencial. Se desconoce cómo logró salir de Venezuela y tampoco hay información sobre su retorno.
Machado se mantuvo oculta desde las elecciones de julio de 2024, en las que Maduro obtuvo un tercer mandato que no fue reconocido por Estados Unidos, la Unión Europea ni varios países latinoamericanos. La dirigente afirma que su candidato, Edmundo González Urrutia, ganó los comicios y difundió copias de actas de votación como prueba del presunto fraude.
