El Ministro de Seguridad Giani Venier, sobre quien pesa una prohibición de acercamiento hacia su esposa e hijo, por violencia de género; fue uno de los co-autores del dictatorial Código de Faltas que este miércoles, Cornejo logró imponer en Diputados, y que según el propio gobierno, tiene por objetivo "castigar a los violentos".
Ahora, mientras el Gobierno de Cornejo sale a castigar las protestas sociales por los tarifazos, los reclamos salariales y las multitudinarias marchas en defensa del agua y en contra del Fracking, increíblemente por otro lado protege y defiende a Venier, un funcionario de primera línea que en base a las medidas en su contra dictadas por la justicia, carece de idoneidad para desempeñar el cargo nada más y nada menos de Ministro de Seguridad de la Provincia; y que tiene en sus manos la lucha contra la Inseguridad y Violencia que castiga a los mendocinos.
Pero además, lo grave es que no es el único caso, ya que Rubén Giacchi, quien era mano derecha de Cornejo y llegó al gobierno como Ministro de Salud, tuvo que irse también denunciado y procesado por violencia de género; mientras que sólo por nombrar a otro, quien era Subsecretario de Trabajo, también debió irse tras ser denunciado por violencia laboral y acoso sexual.
Ahora que estos funcionarios que son violentos o al menos están involucrados en hechos de violencia, sean quienes justamente elaboren o determinen las normas de conducta o comportamiento que debe tener la población, es una "tomada de pelo" al intelecto de los mendocinos, por donde se lo mire.
Y así cómo tanto respecto al Agro, la Seguridad, la Salud, la Educación y la Agroindustria, el gobierno llegó prometiendo una cosa y terminó haciendo otra; en materia de conducta parece que aplica el adagio: "Haz lo que yo digo, pero no lo que yo hago".